Especialistas en adrenalina
Nuestros políticos y sus periodistas son expertos en provocar a su audiencia, la diferencia entre ellos es de ritmo, unos, los segundos, provocan a diario mientras que los otros lo hacen com mayor intensidad cada cuatro años, ¡salvo cuando la situación lo requiere!
Conseguir titulares, provocar al personal, llamar la atención, recordar que existen, aumentar audiencia, discutir, inflamar, enardecer... y una retahíla de sinónimos les hermanan.
Competidores
Si miramos los orígenes del periodismo y lo comparamos con la actualidad podemos ver que han surgido multitud de especializaciones y de medios:
- Periodistas televisivos.
- Locutores
- Periodistas gráficos
- Columnistas
Y esto sin tener en cuenta periodistas dedicados al deporte, economía, política...
El periodismo tine multitud de competidores en la actualidad: Twitter, Facebook, Google, Blogs...
Muchos de estos competidores les quitan poder y obligan a una transformación profunda.
Los políticos tiene también competidores:
- ONG's
- Indignados
- Asociaciones diversas
Sin embargo muchos políticos y periodistas no quieren ceder ni un palmo de sus atributos y su poder. Se niegan a ningún cambio y hacen lo posible para convencer a sus seguidores que aquí no pasa nada.
Un mundo simplificado
Unos y otros pretenden que el mundo es sencillo, que se reduce a unas pocas alternativas, para muchos de ellos la política se reduce a un Sí o a un No, igual que los titulares, algo simple sencillo y con pocas alternativas.
El razonamiento y la complejidad está lejos de sus deseos, aunque muchos periodistas huyen de los modelos simplistas y escriben largos párrafos razonados y argumentados son conscientes de que serán leídos en diagonal y entre líneas.
La intención de los políticos es parecida, a muchos sólo les interesa una cosa: EL VOTO, saben que muy posiblemente no convencerán más que a unos pocos y saben lo único que cuenta.
Sin competencia
El mundo del siglo XX1 puede tener muchos recursos para realizar las funciones de políticos y periodistas, sin embargo hay unos fenómenos que nos pueden
indignar:
- El alcance de los grandes partidos y los grandes medios con enorme audiencia.
- La dictadura de unas mayorías sobre otras opciones.
- Las alianzas de los poderes para dirigir opiniones y obtener votos.
Desde mi punto de vista hay grandes y buenas excepciones que se alejan de estos tópicos, por ejemplo creo que
Dolors Camats i
Josep Cuní se alejan de estos estereotipos.
No puedo hablar aquí de lo creo que representa la publicidad, otro día será!